Perder un vuelo por un problema personal, o bien porque te lo cancelan puede resultar un gran problema si no estamos bien informados de los pasos que debemos seguir. Es muy importante, para este tipo de incidencias, contar con un seguro de viaje y saber que coberturas incluye y además, deberemos tener a mano los datos de contacto para resolver cualquier duda, problema o imprevisto.
Los seguros de viaje se pueden contratar de manera puntual y anual, en este último estarían incluidos todos los viajes que se realizan en un año. Asimismo, es importante revisar correctamente toda la documentación para elegir cuál se ajusta más a nuestras necesidades.
En caso de cancelación del vuelo, todas las compañías están obligadas a efectuar una compensación al cliente ofreciéndole una ruta alternativa y un horario similar. Si esto no se produce, el pasajero podrá solicitar una compensación económica, salvo que la cancelación se produzca por circunstancias extraordinarias, como puede ser un desastre natural o que se le haya comunicado con 2 semanas de antelación al pasajero. En Europa, los derechos del pasajero están recogidos por el Reglamento de la Comunidad Europea (CE) 261/2004.
Pero el problema se incrementa cuando los pasajeros con escalas pierden la conexión y supone la pérdida del viaje en su totalidad. En el caso de que la conexión la haga la misma compañía, está será la responsable de buscar una alternativa de vuelo para poder realizar la escala. Pero cuando la conexión se realiza con otra aerolínea diferente, estas suelen operar en régimen de código compartido y por lo tanto, la compañía seguirá siendo la responsable. En caso de que no exista código compartido, la compañía área que canceló o retrasó la pérdida de la escala será la responsable ante el pasajero en concepto de “daños” y “perjuicios”. Si debido a la cancelación o retraso del vuelo el pasajero debe hacer noche en el lugar donde se ha producido el incidente, la aerolínea deberá asumir los gastos de comida y alojamiento.
En el caso de que el viaje se haya contratado a través una agencia de viajes, será la agencia la responsable de gestionar la búsqueda de alternativas y de asumir todos los costes de alojamiento, comida y billetes.
Por otro lado, si el pasajero no es atendido o compensado según la norma vigente, las reclamaciones pertinentes deben ser dirigidas a la aerolínea. En el caso de que la compañía no se haga cargo de las incidencias, se puede recurrir a la Agencia Estatal de Seguridad Área (AESA), la Organización de Consumidores Unidos (OCU) o FACUA, en el caso de España. Y si la incidencia es mayor, se deberá realizar una denuncia en el tribunal correspondiente.
En caso de que la pérdida del vuelo o de la conexión haya sido culpa del propio pasajero, porque ha llegado tarde o porque ha sufrido cualquier incidencia personal, será el único responsable del daño ocasionado. En casos extraordinarios, y siempre que la causa sea debidamente justificada, las compañías áreas podrán ofrecer una plaza gratuita en el siguiente vuelo disponible.
Y por último, en caso de pérdida o extravío del DNI o del pasaporte, el pasajero deberá presentarse en el aeropuerto con la correspondiente denuncia a la policía, y en caso de estar en el extranjero, será la Embajada o el Consulado el que expedirá un salvoconducto para poder viajar. Cuando ocurren estas incidencias, los seguros de viaje también corren con los gastos de la gestión de la documentación para poder volar.
Fuente:
El Periodista Digital